SANA en Español
Jerusalén ocupada, 4 dic (SANA) La cifra de víctimas de la actual agresión israelí por tierra, mar y aire contra la asediada Franja de Gaza ha aumentado a 15.899 mártires y más de 42.000 heridos.
El Ministerio de Salud palestino detalló que la ocupación israelí cometió en las últimas horas horribles masacres, cobrándose la vida de cientos de mártires y heridos.
Agregó que 349 mártires y 750 heridos llegando a los hospitales, elevando el número de víctimas desde el 7 de octubre pasado ascienden a 15.899 mártires y a más de 42.000 heridos, la mayoría de ellos niños y mujeres, mientras que el mayor número de víctimas sigue bajo los escombros.
El Ministerio confirmó que la ocupación mata y aterroriza deliberadamente al personal médico, a los heridos y a los desplazados en los hospitales de Gaza y el norte para obligarlos a desplazarse forzosamente, ya que las violaciones israelíes contra el sistema de salud provocaron el martirio de 283 miembros del personal médico.
“Debido a las agresiones israelíes 20 hospitales y 46 centros de atención primaria se encuentran fuera de servicio y 56 instituciones sanitarias y 56 ambulancia querdaron destruidas”, añadió, y señaló que la ocupación sigue arrestando a 35 miembros del personal sanitario de la Franja de Gaza, encabezados por el director del Complejo Médico Al-Shifa, Muhammad Abu Salamiya.
Asimismo, advirtió que la continua y brutal agresión israelí hace que el sistema de salud en la Franja de Gaza sea completamente incapaz de atender al gran número de heridos, especialmente porque las fuerzas enemigas bombardean deliberadamente hospitales en Gaza y el norte para dejarlos fuera de servicio.
De acuerdo con el comunicado, todos los hospitales están saturados de heridos, y destacó que más de 1,5 millones de personas desplazadas en centros de acogida, especialmente mujeres embarazadas, niños, pacientes con enfermedades crónicas y heridos están expuestos a una muerte lenta.
El Ministerio renovó su llamado a las Naciones Unidas para que active las disposiciones del derecho internacional humanitario y el Cuarto Convenio de Ginebra para proteger a los hospitales y al personal sanitario y humanitario y criminalizar ser blancos de ataques y bombardeos.
También llamó a todas las partes a proporcionar un corredor humanitario seguro que garantice la entrada de suministros médicos y combustible y la salida de cientos de heridos, subrayando la necesidad de enviar hospitales de campaña con grandes capacidades y equipos médicos para atender al gran número de afectados.
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