Damasco, 28 feb (SANA) El ministro de Asuntos Exteriores y Expatriados, Faisal Al-Mekdad, afirmó hoy que “el hecho de que las generaciones futuras eviten el flagelo de la guerra, como lo estipula la Carta de las Naciones Unidas, choca con la evasión de los países occidentales que son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de sus obligaciones y su empeño por imponer su influencia y hegemonía y alimentar conflictos.
En un discurso por videoconferencia ante la Conferencia de Desarme en Ginebra, el Canciller dijo que Siria enfrentó una guerra injusta, durante la cual algunos países emplearon el arma del terrorismo contra el pueblo sirio, enviaron a decenas de miles de terroristas extranjeros y les proporcionaron diversos tipos de apoyo y armas, incluidas las prohibidas internacionalmente, para servir a sus agendas hostiles a Siria.
Las políticas de esos países llevaron a organizaciones terroristas como el “Daesh” y “Frente Al-Nousra” a tener armas químicas y usarlas repetidamente contra los sirios, dijo el jefe de la diplomacia.
Agregó que esto reafirma la necesidad de abordar las deficiencias en los instrumentos internacionales y la acción conjunta sin politización o desinformación para encontrar un mecanismo de coordinación de los esfuerzos internacionales para enfrentar los actos de terrorismo químico.
El Canciller reiteró el apoyo de Siria a la iniciativa presentada por Rusia a la Conferencia de Desarme para combatir el terrorismo químico y biológico, y para iniciar negociaciones en la conferencia sobre un proyecto de acuerdo para este propósito basado en el texto ruso.
Por otro lado, destacó que la experiencia de Siria con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) confirmó que los encargados de gestionar esta organización cayeron en la trampa de la polarización y la dependencia política y su sumisión a las políticas y dictados de los países occidentales que eran hostiles a Siria.
Instó a los Estados parte de la OPAQ a llevar a cabo durante la próxima conferencia una revisión responsable y precisa de la acción de la organización y corregir los errores evidentes y las violaciones de las disposiciones del acuerdo a fin de preservar la organización y su futuro.
Israel constituye una amenaza permanente y grave para la paz y la seguridad regional e internacional, además de su lanzamiento de repetidos ataques contra los territorios sirios y palestinos, manifestó, y agregó que esta entidad sigue modernizando y ampliando su arsenal de todo tipo de armas de destrucción masiva, beneficiándose del apoyo brindado por algunos países.
Israel y sus partidarios están obstruyendo el establecimiento de una zona libre de armas de destrucción masiva en el Medio Oriente, lo que requiere que las Naciones Unidas lo obligue a unirse al Tratado de No Proliferación Nuclear y someter todas sus instalaciones y armas nucleares al sistema de salvaguardias integrales del Organismo Internacional de Energía Atómica, agregó el Ministro.
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