A pesar de que las autoridades de Rusia desconocieron la titularidad de los misiles detonados en Polonia y la propia OTAN los vinculó al sistema antiaéreo ucraniano de defensa, el presidente Zelenski insistió en la responsabilidad de Moscú durante la noche del 16 de noviembre.
Damasco, 17 nov (SANA) El 15 de noviembre fue un día tenso para Europa oriental. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguró que Rusia golpeó territorio de la OTAN con misiles que cayeron en un pueblo polaco cercano a la frontera con Ucrania. Esta información, dada a conocer sin pruebas, fue difundida por varios medios occidentales.
Aunque conforme avanzaron las horas se desvinculó a Rusia de la responsabilidad de la explosión y durante los momentos de discernimiento las propias autoridades polacas llamaron a difundir únicamente información confirmada, medios occidentales no dudaron en atribuir las detonaciones a Rusia y en especular sobre una escalada del conflicto entre Kiev y Moscú.
El diario británico The Mirror aseveró que “misiles rusos” impactaron suelo polaco, enfatizando que el país europeo es uno de los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). La prestigiosa revista Time hizo lo propio al notificar que los dispositivos bélicos que cruzaron la frontera de Ucrania con Polonia eran rusos. También esta versión fue difundida por la agencia estadounidense de noticias The Associated Press, que citó como fuente a “un oficial mayor de la inteligencia de EEUU”.
Posteriormente de que la agencia AP asegurara que se trataba de “misiles rusos”, publicó la siguiente aclaración: “En versiones anteriores de una historia publicada el 15 de noviembre de 2022, The Associated Press informó erróneamente, basándose en información de un alto funcionario de inteligencia estadounidense que habló bajo condición de anonimato, que misiles rusos habían cruzado a Polonia y matado a dos personas. La información posterior demostró que los misiles eran de fabricación rusa y que probablemente fueron disparados por Ucrania para defenderse de un ataque ruso”.
La versión que difundieron este tipo de medios fue similar a la que dieron a conocer autoridades, políticos y medios ucranianos. La diputada Lesia Vasylenko escribió en sus redes sociales: “¡Esto es culpa de Rusia!”. Lo mismo hizo el diario ucraniano Kyiv Post: atribuir la culpa a Moscú.
The Telegraph, también británico, repitió el fenómeno, junto al Metro, del mismo país. También el espacio informativo alemán Heute repitió la dosis, al identificar como rusos los objetos detonados en Polonia. La publicación alemana inclusive habló de “muchos” muertos.
En el mismo país, el diario Bild (un rotativo de titulares escandalosos e imágenes explícitas que incluso fue criticado por el novelista alemán Heinrich Böll) señaló directamente al presidente de Rusia, Vladímir Putin, como responsable de los hechos explosivos en Polonia.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, también abonó a esta ola de especulaciones con una frase escrita al final de un mensaje en sus redes sociales: “Incidente resultado de una ola masiva de ataques con misiles contra Ucrania por parte de Rusia. Rusia debe detener su guerra ilegal”.
La Razón y El Independiente, ambos medios españoles, se sumaron a la atribución de los hechos a la responsabilidad rusa.
A pesar de que las autoridades de Rusia desconocieron la titularidad de los misiles detonados en Polonia y la propia OTAN los vinculó al sistema antiaéreo ucraniano de defensa, el presidente Zelenski insistió en la responsabilidad de Moscú durante la noche del 16 de noviembre.
“Por supuesto, uno de los principales asuntos en la reunión del Consejo de Seguridad [de la ONU] es la situación en Polonia y el esclarecimiento de todas las circunstancias sobre cómo la agresión rusa cruzó la frontera polaca. La agresión rusa tomó la vida de dos ciudadanos polacos”, insistió el mandatario ucraniano mediante su canal oficial de Telegram.
Varios medios polacos informaron el 15 de noviembre del impacto de dos misiles en la localidad de Przewodów, a unos siete kilómetros de la frontera con Ucrania, que causaron dos muertos, pero más tarde las autoridades de Polonia hablaban de un solo misil. El Ministerio de Exteriores polaco se limitó a decir que el proyectil era de fabricación “rusa”, denominación usada para referirse a la antigua producción soviética.
Fuente: Sputnik