“Ello está en línea con la orden de Washington de desplazar a Rusia del mercado energético europeo”
Damasco, 06 oct (SANA) Alemania obedece sin chistar las instrucciones rusófobas de la Casa Blanca que ordenó desplazar a Rusia del mercado energético europeo, aseguró el responsable del Ministerio de Exteriores ruso para Europa, Oleg Tiapkin.
“Todas esas declaraciones políticas de abandonar a finales de 2023 las importaciones del gas ruso y el orgullo que experimenta Alemania [canciller Olaf Scholz] y que el país ya ahora prescinde del gas ruso [ministro de Economía Robert Habeck] demuestran que la élite alemana sigue incuestionablemente las instrucciones rusófobas de Estados Unidos”, dijo el diplomático a Sputnik.
Tiapkin remarcó que “ello está en línea con la orden de Washington de desplazar a Rusia del mercado energético europeo”. Consignó también que esa política comenzó a implementarse durante el gobierno de Angela Merkel.
“Ahora vemos las secuelas de esa estrategia. Es suficiente con repasar los ‘éxitos’ en ese sentido del gabinete de Olaf Scholz para que todo esté claro. La prohibición a la puesta en marcha del gasoducto Nord Stream 2, las presiones a las estructuras subsidiarias de la compañía rusa Gazprom y luego su expropiación, la nacionalización de facto de los activos de la petrolera rusa Rosneft, la inacción de Berlín ante el bloqueo del tránsito de nuestro gas por parte de Varsovia y Kiev, las restricciones a la reparación y el mantenimiento de los equipos del gasoducto Nord Stream 1”, detalló.
Pese a todo ello, denunció, declaran a Rusia como proveedor no fiable y la acusan de supuestamente incumplir los contratos.
Además, el funcionario puntualizó que un rechazo total de Berlín al gas ruso provocará una crisis energética en Alemania.
“Un rechazo total de Alemania al combustible azul ruso, dentro de los dos años siguientes, es posible. En cuanto a las consecuencias de esta medida, ya son evidentes: una crisis económica y energética en Alemania, enorme crecimiento de los precios de los recursos energéticos, reducción y traslado al extranjero de la producción e inversiones, y como resultado la disminución de la competitividad de la economía alemana y el poder adquisitivo de la población”, comunicó el diplomático a Sputnik.
Agregó que según el titular de Economía alemán, Robert Habeck, el futuro de Alemania está en peligro y le amenazan daños a largo plazo.
Alemania vive una crisis económica por el aumento en flecha del gas y la electricidad debido, en parte, a las limitaciones impuestas al gas procedente de Rusia.
El 21 de julio, Annalena Baerbock, la ministra de Exteriores alemana, afirmó que el Gobierno temía sublevaciones sociales debido al encarecimiento del gas.
Scholz bloqueó las entregas del gas ruso por el nuevo gasoducto Nord Stream 2, que une a Rusia y Alemania por el fondo del mar Báltico y que estaba listo para operar desde octubre de 2021. El ducto fue objeto de un ataque terrorista internacional el pasado 26 de septiembre, según el proceso abierto por la Fiscalía General de Rusia.
Estados Unidos, que siempre se opuso a la construcción de ese gasoducto y que impuso sanciones para impedir su tendido y puesta en marcha, negó su implicación en el ataque.
Fuente: Sputnik