Washington, a través del programa “127E”, entrena, financia, arma y brinda información de inteligencia a fuerzas extranjeras, pero a diferencia de otros programas de apoyo exterior que se realizan bajo la consigna de fortalecer las fuerzas locales de los países, estas fuerzas son enviadas en misiones especiales para lograr objetivos meramente estadounidenses.
Washington, 4 jul (SANA) Documentos secretos del Departamento de Defensa de EE.UU. (Pentágono) revelaron que Estados Unidos está involucrado en un programa secreto de guerras proxy en muchos países, incluido Siria.
Un artículo del sitio web estadounidense The Intercept informó sobre la base de documentos clasificados a los que tuvo acceso en virtud de la Ley de Libertad de Información y de entrevistas con funcionarios estadounidenses actuales y anteriores, que el programa “127E” incluyó 14 subprogramas que estuvieron activos en la región de Medio Oriente y Asia Pacífico hasta 2020, bajo los cuales los comandos estadounidenses realizaron 23 operaciones entre 2017 y 2020.
El general retirado Joseph Votel, quien comandó las Fuerzas de Operaciones Especiales y el Comando Central de EE. UU. en el Medio Oriente, reconoció el uso del programa 127E en Siria, Egipto, Líbano y Yemen como parte de lo que llamó esfuerzos antiterroristas.
Votel aclaró que el programa 127 A en el Líbano recibió un nombre simbólico de Leon Hunter, y en Siria y Yemen, Yukon Hunter, mientras que en Egipto se llamó Enigma Hunter.
Otro ex funcionario de defensa, quien habló bajo condición de anonimato, confirmó el uso de una copia de este programa también en Irak y Túnez, así como en Afganistán, Camerún y otros.
Los documentos y las entrevistas ofrecen detalles sobre autorización a los comandos estadounidenses para llevar a cabo operaciones de entrenamiento y financiamiento a fuerzas extranjeras bajo el pretexto de combatir el terrorismo.
Washington, a través del programa “127E”, entrena, financia, arma y brinda información de inteligencia a fuerzas extranjeras, pero a diferencia de otros programas de apoyo exterior que se realizan bajo la consigna de fortalecer las fuerzas locales de los países, estas fuerzas son enviadas en misiones especiales para lograr objetivos meramente estadounidenses.
Uno de los documentos revela que el costo del programa y sus operaciones en el período 2017-2020 ascendió a 310 millones de dólares, Aunque esta suma constituyó una pequeña parte del presupuesto de gastos de defensa para el mismo período, pero constituye un aumento significativo en el presupuesto asignado al programa si se compara con los 25 millones de dólares cuando se lanzó el programa con otro nombre en 2005.
fm/ws