Damasco, 22 abr (SANA) El 18 de marzo de 2019, dos aviones de combate estadounidenses F-15 atacaron con dos bombas, una de 225 kg y la segunda de 907 kg, un convoy de civiles que salió de la localidad siria de al-Baghuz en la provincia de Deir Ezzor, lo cual provocó el exterminio del convoy y la muerte de 80 personas, incluidos mujeres y niños.
El referido poblado quedó completamente destruido por los bombardeos aéreos de la coalición internacional dirigida por Washington durante los años 2018 y 2019.
Son crímenes de guerra y lesa humanidad que la comunidad internacional encubre.
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