Damasco, 03 feb (SANA) En el centro de la antigua ciudad de Damasco y junto a otros muchos monumentos antiguos que han dado la identidad a la capital habitada más antigua de la historia, se erige un edificio meticulosamente construido con piedras de basalto negro y otras de caliza amarilla. Se trata de Al-Madrasa Az-Zahiriya o la biblioteca Az-Zahiriyah, considerada la más antigua en el Levante.
La fundación de la biblioteca se remonta al año 1277, tomando su nombre de su fundador el Sultán Baibars. Está ubicada frente a la Gran Escuela Adiliya, ambos se encuentran en un callejón que comunica la Ciudadela de Damasco con la Mezquita Omeya.
La biblioteca contiene 70.000 títulos en árabe y alrededor de 100.000 volúmenes, incluidos periódicos muy antiguos desde 1878 dC, además de libros muy antiguos.
Al-Madrasa Az-Zahiriya tuvo gran rol en la arabización de las ciencias y dispone de manuscritos y libros únicos de los cuales se beneficiaron miles de investigadores y académicos dentro y fuera de Siria, incluso hasta nuestros días, este centro desempeña un papel importante en la prestación de servicios científicos y culturales.
La biblioteca consta de tres salas y tres almacenes; también contiene un departamento de fotografía que incluye equipos de última generación para fotocopiar libros y documentos.
Se ha convertido en un importante destino turístico y arqueológico cuyos visitantes pueden disfrutar de su arquitectura espléndida que contiene muchos elementos de la cultura árabe y el arte islámico.
Al-Madrasa Az-Zahiriya es uno de los edificios más bellos construidos por los mamelucos y se diferencia del resto de bibliotecas damascenas por su arte arquitectónico inspirado en las tradiciones del arte ayyubí que se distingue por sus piedras de color blanco y rosado, y sus muros decorados con alabastro colorado y conchas en forma de mosaico..
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