Sochi, SANA
El enviado especial del presidente ruso a Siria, Alexander Lavrentiev, afirmó que no hay solución media con los terroristas, ya sea el “Daesh” y la “Junta para Liberación del Levante”.
“El terrorismo debe ser erradicado en Siria y no hay soluciones medias con los terroristas, ya sea el “Daesh” o la “Junta para Liberación del Levante”, declaró Lavrentiev, al margen de la decimoquinta ronda de conversaciones de Astaná sobre Siria.
Agregó que los países garantes de la fórmula de Astaná pretenden durante la reunión dar un fuerte impulso al proceso de arreglo político y abordar el retorno de los refugiados sirios a su país y la situación económica en Siria.
Lavrentiev destacó la importancia del trabajo del Comité de Debate Constitucional en Ginebra para encontrar una solución política a la crisis en Siria. “Durante la cuarta y quinta rondas, se expresaron muchas ideas y propuestas interesantes y se está trabajando para proporcionar un ambiente constructivo”, añadió.
Reveló que Estados Unidos se negó a participar en la 15a reunión de Astaná a pesar de enviar invitación que desafortunadamente fue rechazada ya que los estadounidenses están actualmente ocupados con sus asuntos internos.
Comenzó hoy en la ciudad rusa de Sochi el decimoquinto Encuentro Internacional sobre Siria (según la fórmula de Astaná) con la participación de una delegación de la República Árabe Siria encabezada por Ayman Susan, el Ministro Asistente de Exteriores y Expatriados.
En la cita, participan delegaciones de los países garantes del proceso de Astaná y son: la delegación rusa encabezada por el enviado especial del presidente ruso a Siria, Alexander Lavrentiev, la delegación de la República Islámica de Irán encabezada por el principal asistente del canciller iraní para asuntos políticos especiales, Ali Asghar Khaji, y la delegación del régimen turco.
También están presentes representantes de países enn condición de observadores en el proceso de Astaná, y son: Irak, Líbano y Jordania, así como una delegación de las Naciones Unidas encabezada por el Enviado Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, y un representante del Ministerio de Exteriores de la República de Kazajstán, país anfitrión del proceso de Astaná, y representantes de la llamada “Oposición Armada Siria”.
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