SANA en Español
Damasco, SANA
Bajo el lema “al-Aqsa entre la quema y la judaización… la responsabilidad de la nación” se sostuvo este miércoles en la Biblioteca de al-Assad en Damasco un foro con motivo del 47 aniversario de la quema de la mezquita al-Aqsa en Jerusalén (Qudus).
Este foro contó con la asistencia de destacadas figuras políticas y religiosas sirias y palestinas, tales como la consejera para asuntos políticos y mediáticos de la Presidencia de la República Árabe Siria, Bothaina Shaaban, el ministro de al-Awqfa, Mohamad Abdulsatar Assayed y el arzobispo de Sebaste y líder del Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Griega en Jerusalén, Theodosious, Atallah Hanna.
Al hacer uso de la palabra, Shaaban señaló que lo que sucede hoy en día en los países árabes sirve a los intereses del ente sionista y sus planes de colonización no solo en Palestina sino también en todo el mundo árabe.
Shaaban llamó a los países árabes a cerrar filas con los detenidos en las cárceles sionistas y a hacer frente a la política de judaización, la quema de al-Aqsa, entre otras medidas tomadas por las fuerzas israelíes contra nuestro pueblo en Palestina.
Por otro lado, la alta funcionaria siria explicó que el ente sionista trata de alcanzar sus objetivos en Oriente Medio sin manchar sus manos, o sea a través de instrumentalizar a países árabes para realizar su propio proyecto.
En este contexto, destacó que los grupos terroristas takfiristas son bandas sionistas porque están trabajando en servicio del esquema del ente sionista.
Shaaban enfatizó que la lucha en Palestina se reflejará positivamente sobre la situación en Siria, Libia, Yemen e Irak.
“Todos estamos a bordo de un solo buque y nuestra batalla es sola es contra el ente sionista y sus aliados”, recalcó.
A continuación dirigió un saludo al Ejército sirio y los países amigos, Rusia e Irán, así como la Resistencia en el Líbano por su apoyo a Siria que “no cabe duda cantará victoria pronto sobre sus enemigos”.
Cabe recordar que el 21 de agosto de 1969, un sionista radical de origen australiano prendió fuego a la mezquita de al-Aqsa en Jerusalén, pensando que la quema de la misma podría ayudar en la construcción de un tercer templo judío.
Lynn A.
