Damasco, 22 nov (SANA) Recientes excavaciones en Siria han sacado a la luz lo que podría ser el registro más temprano de escritura alfabética en la historia, encontrado en cilindros de arcilla en una tumba antigua.
Los investigadores de la Universidad Johns Hopkins, quienes lideraron el estudio, indican que estas inscripciones datan aproximadamente del año 2400 a.C., lo que las sitúa unos 500 años antes que cualquier otra forma de escritura alfabética conocida.
En consecuencia, este descubrimiento podría transformar completamente nuestra comprensión sobre los orígenes de los alfabetos, su difusión entre diversas culturas y su impacto en las primeras civilizaciones urbanas.
Glenn Schwartz, profesor de arqueología en la Universidad Johns Hopkins y descubridor de los cilindros, explicó:
“Los alfabetos revolucionaron la escritura al hacerla accesible a personas más allá de la realeza y la élite social. La escritura alfabética cambió la forma en que las personas vivían, pensaban y se comunicaban.”
Asimismo, el antropólogo añadió: “Este nuevo descubrimiento muestra que las personas estaban experimentando con nuevas tecnologías de comunicación mucho antes y en un lugar diferente del que habíamos imaginado hasta ahora.”
Schwartz presentará más detalles sobre este hallazgo en la próxima reunión de la American Society of Overseas Research.
Schwartz ha dedicado años al estudio del desarrollo de las primeras áreas urbanas en Siria y la emergencia de ciudades más pequeñas en la región, trabajando con colegas de la Universidad de Ámsterdam en una excavación que duró 16 años en Tell Umm-el Marra, un importante centro urbano temprano en el oeste de Siria.
En este sitio, descubrieron tumbas de la Edad del Bronce Temprano, incluyendo una excepcionalmente bien conservada con seis esqueletos, joyas y utensilios diversos; además, cerca de estos artefactos, se encontraron cuatro cilindros de arcilla con inscripciones alfabéticas.
“Los cilindros estaban perforados, así que imagino que había una cuerda que los ataba a otro objeto para que actuara como etiqueta. Tal vez detallen el contenido de un recipiente, o tal vez de dónde venía el recipiente o a quién pertenecía”, comentó Schwartz. “Sin un medio para traducir la escritura, solo podemos especular.”
Mediante técnicas de datación por carbono 14, se confirmó la antigüedad de las tumbas y los artefactos.
“Anteriormente, los académicos pensaban que el alfabeto se inventó en Egipto o sus alrededores en algún momento después de 1900 a. C.”, explicó Schwartz.
“Pero nuestros artefactos son más antiguos y de una zona diferente en el mapa, lo que sugiere que el alfabeto puede tener una historia de origen completamente diferente de la que pensábamos.”
Fuente: Contramuro