Nueva York, 11 oct (SANA) Durante una sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el embajador permanente de Siria ante la ONU, Qusay Dahhak, exigió una acción inmediata para detener las agresiones de “Israel” contra territorio sirio y garantizar que no se repitan.
Además, enfatizó la necesidad de que el Consejo adopte medidas contundentes e inmediatas, y emite una resolución clara y sin ambigüedades que obligue a “Israel” a cesar su agresión contra Palestina y Líbano, y frene sus intentos de invadir territorio libanés.
En su declaración, Dahhak subrayó que las autoridades de ocupación israelí no escuchan a este Consejo y continúan desafiando a la ONU y al derecho internacional, mientras perpetran crímenes atroces y derraman la sangre de civiles inocentes.
Señaló que la ampliación de las agresiones israelíes para incluir a Líbano y la intensificación de sus agresiones contra Siria y otros países de la región son el resultado de la certeza de que algunos miembros del Consejo impiden que se tomen medidas efectivas para frenar la agresión y los crímenes israelíes.
Dahhak destacó la gravedad de la situación y condenó que ciertos miembros del Consejo de Seguridad, que se autoproclaman defensores de los derechos humanos, ignoren las violaciones israelíes a los principios de la ONU y al derecho internacional, llegando incluso a tergiversar los hechos para presentar a “Israel” como víctima en lugar de agresor que amenaza la seguridad y estabilidad regionales e internacionales.
Ante la creciente preocupación por las amenazas israelíes de convertir a Líbano en otra Gaza, Dahhak instó al Consejo a actuar con urgencia para detener la brutal agresión israelí que devastó a miles de civiles inocentes, periodistas y personal médico, y que sembró la destrucción en vastas áreas, obligando a cientos de miles de personas a huir tanto dentro de su propio país como hacia Siria.
El embajador sirio también denunció las agresiones israelíes deliberadas contra civiles, el uso de armas pesadas en áreas densamente pobladas y las amenazas abiertas de “Israel” de emplear armas prohibidas, incluida la destrucción masiva.
“Estas agresiones no solo desestabilizaron la región durante décadas, sino que también impidieron el desarrollo y el bienestar de sus habitantes”, destacó.
Dahhak enfatizó que, simultáneamente al aumento de la agresión contra Líbano, “Israel” intensificó sus agresiones contra Siria, que ahora ocurren casi a diario.
“En los últimos días, varios edificios residenciales en Damasco fueron atacados, lo que resultó en la muerte de 15 civiles, en su mayoría mujeres y niños, y decenas de heridos, además de generar miedo entre los ciudadanos y causar daños materiales significativos”, denunció.
Asimismo, informó que las agresiones israelíes afectaron la carretera internacional entre Damasco y Beirut, utilizada por miles de personas que huyen de la violencia israelí en Líbano, agravando aún más su situación humanitaria.
También, indicó que “Israel” atacó instalaciones económicas y un centro de recolección de ayuda alimentaria y médica en la ciudad industrial de Hasyieh, destinada a los refugiados libaneses.
Dahhak reiteró el derecho de Siria a defender la integridad de su territorio por todos los medios permitidos por el derecho internacional, y solicitó la intervención urgente del Consejo de Seguridad para garantizar el fin de las agresiones israelíes y evitar su repetición.
Además, expresó la solidaridad de Siria con Líbano ante la tragedia humanitaria provocada por la agresión israelí.
“A pesar de los desafíos, incluidas las sanciones unilaterales, Siria tomó medidas para brindar asistencia humanitaria a más de 350 mil personas que huyeron a su territorio, incluidos 100 mil libaneses”, resaltó Dahhak.
Agregó que el gobierno sirio, en coordinación con la Alta Comisión para los Refugiados, la Media Luna Roja Árabe Siria y organizaciones locales, habilitó centros de acogida y facilitó el acceso a servicios básicos como atención médica, alimentos, transporte, asistencia legal y documentos oficiales, todo de manera gratuita.
“Siria espera una respuesta positiva por parte de los países miembros de la ONU a los llamamientos del Alto Comisionado para los Refugiados y subraya la necesidad de que el Consejo de Seguridad adopte medidas decisivas y emita una resolución clara que obligue a Israel a detener su agresión contra Palestina y Líbano, y frene sus intentos de invadir territorio libanés, lo que constituye una violación flagrante de la soberanía y estabilidad del país”, ratificó.
Finalmente, el embajador Dahhak insistió en que “Israel” debe rendir cuentas por sus crímenes y que el Consejo de Seguridad debe implementar sus resoluciones sobre el conflicto árabe-israelí, en particular las resoluciones 242, 338 y 497.
Concluyó que los intentos de “Israel” de quebrar la voluntad de los pueblos de la región y forzarlos a renunciar a sus derechos legítimos de resistencia y recuperación de sus tierras ocupadas no tendrán éxito, ya que, a lo largo de la historia, la palabra final siempre fue para los pueblos dueños de su tierra, por mucho que dure la ocupación y se intensifiquen sus crímenes.
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