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Los países occidentales hacen la vista gorda sobre la posesión por parte del régimen israelí de capacidades nucleares fuera del marco del Tratado de No Proliferación Nuclear y el Acuerdo de Salvaguardias Integrales, y guardan silencio respecto a las declaraciones de sus funcionarios sobre la posibilidad de utilizar una bomba nuclear contra el pueblo palestino en Gaza, dijo el jefe de la diplomacia siria.
Damasco, 28 feb (SANA) El ministro de Asuntos Exteriores y Expatriados, Faisal Al-Mekdad, destacó que la Conferencia de Desarme que se celebra en Ginebra es una oportunidad excepcional para que los Estados miembros reafirmen sus compromisos en las esferas de desarme y control de armamentos, especialmente en el campo nuclear, para evitar que la humanidad enfrente estragos y guerras.
“Las declaraciones de Occidente no coinciden con sus acciones, y vemos más incumplimiento en los compromisos a nivel regional e internacional debido a su insistencia en seguir un enfoque destinado a continuar su hegemonía y superioridad militar a expensas de la seguridad, estabilidad y existencia de otros países y pueblos”, criticó el Canciller sirio en un discurso pronunciado por videoconferencia.
Destacó que sin el apoyo de Estados Unidos y otros países aliados de “Israel”, la bárbara agresión israelí contra el indefenso pueblo palestino en la Franja de Gaza no se habría prolongado por quinto mes.
De manera descarada, los países occidentales hacen la vista gorda sobre la posesión por parte del régimen israelí de capacidades nucleares fuera del marco del Tratado de No Proliferación Nuclear y el Acuerdo de Salvaguardias Integrales, y guardan silencio respecto a las declaraciones de sus funcionarios sobre la posibilidad de utilizar una bomba nuclear contra el pueblo palestino en Gaza, dijo el jefe de la diplomacia siria.
Agregó que Damasco afirma que la Conferencia de las Naciones Unidas para establecer una zona libre de armas nucleares y otras armas de destrucción masiva en Medio Oriente, en la que Estados Unidos e Israel rechazan participar, no constituye una ruta alternativa a la pertinente resolución emitida en 1995.
Por otro lado, denunció que la experiencia de Siria con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas reveló la peligrosa polarización que tiene lugar dentro de este organismo y el dominio de los países occidentales sobre el trabajo de su Secretaría Técnica para atacar a Siria mediante el establecimiento de mecanismos fuera del mandato y con estándares que carecen de la más mínima neutralidad y profesionalismo.
Según la opinión del titular sirio, “el comportamiento de Occidente duplicó el peligro del terrorismo químico y alentó a las organizaciones terroristas a poseer, desarrollar y utilizar armas químicas contra civiles y el ejército sirio, y estos hechos fueron ignorados por Occidente e incluso adoptó la narrativa de los terroristas y la utilizó como pretexto para lanzar agresiones militares contra Siria”.
Por otro lado, llamó a apoyar la iniciativa de Rusia en la Conferencia de Desarme para redactar un acuerdo internacional encaminado a reprimir el terrorismo químico y biológico ya que, según Al-Mekdad, impedir que las organizaciones terroristas utilicen armas de destrucción masiva se ha convertido en una cuestión necesaria para garantizar la seguridad internacional.
Siria trabajará junto con los estados miembros serios por reactivar el papel de la Conferencia de Desarme, especialmente la Conferencia de Desarme Nuclear, y expresa su esperanza de que haya una voluntad política sincera para implementar el mandato de la Conferencia y respetar sus reglas de procedimiento y principios, concluyó el Canciller.
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