Damasco, 31 ene (SANA) En su primer gran discurso como Secretario de Defensa británico, Grant Shapps dijo que Gran Bretaña debería prepararse para una guerra con China, Rusia, Irán y Corea del Norte en los próximos cinco años.
Dar prioridad a la remilitarización frente al crecimiento económico es una miopía peligrosa, señaló un informe publicado por el sitio digital ruso International Affairs Journal.
Conforme a la publicación, si el Reino Unido y Estados Unidos intentaran enfrentarse a los cuatro países de la lista negra del secretario de Defensa británico, Grant Shapps, a saber, China, Rusia, Irán y Corea del Norte, tocarían ocho efectivos por cada soldado británico o estadounidense.
En su primer gran discurso, Shapps instó a Reino Unido a prepararse para una gran guerra en los próximos cinco años.
Mientas el titular británico dio esta alerta, el primer ministro de Chna Li Qiang, sostuvo en Dublín un encuentro con el líder irlandés, Leo Varadkar, y destacó el enorme potencial de una mayor cooperación económica y comercial entre ambos países.
Irlanda y Gran Bretaña son estrechos aliados de Estados Unidos y están integrados en la misma arquitectura de seguridad mundial. Mientras un país llama a prepararse para la guerra, el otro estrecha lazos con el supuesto enemigo.
A juicio de International Affairs Journal, el gobierno irlandés no consideró la posibilidad de ese conflicto.
Según el reporte, el recién definido eje del mal de Shapps (China, Rusia, Irán y Corea del Norte) cuentan con un total de 8,2 millones de soldados, tanto en activo como en la reserva. Por tanto, unos 73 mil efectivos británicos sumado al ejército de Estados Unidos (1,07 millones) palidece en comparación con su supuesto adversario.
Unido a ello, en la actualidad Estados Unidos y Reino Unido están inmerso en una terrible crisis de reclutamiento.
A principios de este mes, los portaviones británicos no fueron enviados al Mar Rojo debido a la escasez de marineros.
De acuerdo con International Affairs Journal, las maquinaciones de Shapps quedaron reducidas al intento de la OTAN de recuperar relevancia con el telón de fondo del deterioro de la situación en Ucrania.
Por tanto, el plan de respaldo de la alianza parece consistir en preparar al mundo occidental para una guerra global total y una posible aniquilación nuclear.
¿Cómo será ese conflicto y cómo ganarlo? ¿Cuándo tendrá lugar la militarización, cuánto costará o cómo funcionará?, pregunta el medio ruso.
Tal vez llegó el momento de que los partidarios de la remilitarización rellenen los espacios en blanco, concluyó.
Fuente: Al Mayadeen