Damasco, SANA
El presidente Bashar al-Assad concedió este domingo una entrevista al canal iraní Khabar en la cual acotó que el giro dado por las posturas de los responsables occidentales y sus declaraciones a la prensa, tanto las positivas como las negativas, no se pueden tomar en serio por la falta de confianza en los mismos.
El mandatario sirio destacó que el futuro de Siria y su régimen político están en mano del pueblo sirio y no de los responsables occidentales.
Asimismo dijo que Siria, Rusia, Irak e Irán deben vencer el terrorismo, si no la región será destruida por completo, criticando que el terrorismo es una nueva herramienta para someter la región que no tendrá otra opción que vencerlo si desea ser independiente y próspera.
El presidente al-Assad criticó que Siria no ha visto los resultados de la Coalición orquestada por Washington, simplemente porque los países que apoyan al terrorismo no pueden combatirlo, enfatizando que la lucha contra el terrorismo se produce a través de ejercer presión sobre los países que lo financian y arman para que dejen de hacerlo.
El texto detallado:
En respuesta a una pregunta sobre los cambios que se producen a nivel internacional hacia la situación en Siria, donde los países que insistían en tumbar el régimen sirio, abogan actualmente por la participación del presidente al-Assad en un gobierno de transición, el mandatario sirio aclaró que Siria no tiene confianza en los funcionarios occidentales ni en sus declaraciones tanto positivas como negativas.
Asimismo subrayó que los cambios en la postura de Occidente se deben a que el terrorismo que han patrocinado se volvió en su contra, y a las oleadas de inmigrantes que llegan a sus países, no sólo de Siria, pero de diferentes países de Oriente Medio, reiterando que a pesar de estos cambios las posturas de Occidente son desconfiables.
Respondiendo una pregunta sobre las posiciones de Occidente hacia la situación en Siria, el presidente al-Assad señaló que “los países occidentales tienen un amo, que es Estados Unidos. Todos estos países se comportan de acuerdo con los dictámenes de su maestro norteamericano”. Por lo tanto “las declaraciones de todos estos países son similares”.
El mandatario sirio denunció que Occidente quiere cambiar el régimen sirio para crear mini estados débiles a fin de garantizar la seguridad del ente sionista.
Asimismo advirtió del peligro del terrorismo que sufre la región, puesto que el mismo se declaró como Islámico y en realidad no tiene nada que ver con el islam. “Estos grupos están promoviendo la sedición entre los diferentes componentes de la región en general… Ahora, afortunadamente, hay una gran conciencia en nuestra sociedad sobre el peligro de la sedición sectaria…. Pero con el tiempo, y con la continuación de la incitación sectaria, se crearía una brecha entre los diferentes componentes de la sociedad y surgirá una nueva generación educada en ideas equivocadas, esto será un peligro muy grave”, advirtió el mandatario sirio.
En cuanto a las posturas de Turquía y Arabia Saudita hacia el cambio del régimen en Siria, el presidente al-Assad dijo que cualquier charla sobre el régimen político en Siria es un asunto interno y ni Arabia Saudita ni Turquía tienen derecho a hablar de democracia.
Respondiendo una pregunta sobre las razones detrás de la crisis en Siria, el mandatario sirio dijo que el Estado asuma una parte de la responsabilidad, pero en cambio ha trabajado para realizar muchas reformas a todos los niveles.
El presidente al-Assad dijo que el factor principal detrás de la crisis siria es la injerencia extranjera en los asuntos internos del país.
Asimismo reiteró que el pueblo sirio solamente es el que decide sobre el futuro de su país y no ningún actor exterior.
De igual manera, el mandatario sirio reiteró el compromiso de Siria con la lucha contra el terrorismo hasta extirparlo y con el diálogo intersirio hasta arreglar la crisis.
En cuanto a la disposición del Gobierno sirio de sentarse a la misma mesa de diálogo con los terroristas armados, el presidente al-Assad dijo que esto se puede realizar en un solo caso cuando estos armados depongan sus armas y vuelvan a sujetarse a las leyes del Estado sirio. Sin embargo hay grupos terroristas que se niegan al diálogo y piensan que están sirviendo a su religión al cometer las masacres. “Es imposible dialogar con estos grupos”, dijo el presidente.
A respuesta a una pregunta sobre las razones detrás el fracaso de las operaciones de la llamada “Coalición internacional anti Estado Islámico”, el presidente al-Assad explicó que esta alianza fracasó “porque el ladrón no puede ser él mismo el policía.
El presidente al-Assad criticó que Siria no ha visto los resultados de la Coalición orquestada por Washington, simplemente porque los países que apoyan al terrorismo no pueden combatirlo, enfatizando que la lucha contra el terrorismo se produce a través de ejercer presión sobre los países que lo financian y arman para que dejen de hacerlo.
Y sobre los Estados que pretextan que la permanencia del presidente al-Assad en el poder es la causa de la continuación de la guerra en Siria, el mandatario sirio dijo: “Si yo fuera un pretexto para el terrorismo en Siria, ¿cuál es el pretexto para el terrorismo en Yemen. No estoy en Yemen. ¿Quién es el pretexto para el terrorismo en Libia? ¿Quién es el pretexto para el terrorismo en Irak? De hecho, si tomamos al Estado Islámico como ejemplo, verá que la misma no apareció en Siria. Apreció en Irak en 2006, cuando los estadounidenses gestionaban la mayoría de los asuntos, si no todo, en particular los de la seguridad en Irak.”
Respecto a la nueva coalición que ha comenzado a formarse en la región entre Siria, Irán, Rusia e Irak, el mandatario sirio acotó que esta alianza debe vencer el terrorismo, si no la región será destruida por completo. Asimismo resaltó que hay grandes chances para que esta nueva alianza tenga éxito.
En cuanto del tema de los refugiados sirio, el presidente señaló que la explotación occidental de la crisis de los refugiados es un asunto más doloroso que convertirse en un refugiado.
Para resolver la crisis de los refugiados e inmigrantes, el mandatario sirio llamó a buscar las razones que impulsaron a estos mismos abandonar su país, las cuales se plasman en el terrorismo y el continuo apoyo de Occidente a este flagelo.
“La demanda de cada refugiado es detener el apoyo al terrorismo”, acotó.
Y sobre su evaluación de la situación en Siria y hasta cuándo durará la crisis, el presidente al-Assad lamentó que la crisis continuará mientras haya partes que apoyen y financien al terrorismo. “No estamos luchando solamente contra los grupos terroristas dentro de Siria, sino también contra grupos terroristas que proceden de todas partes del mundo con el apoyo de los más ricos y los más poderosos países”. Asimismo hizo referencia a los cambios en el escenario internacional, lo que podría dar paso a una solución política de la crisis, sin embargo esta solución no se puede alcanzar mientras que existan países que patrocinan el terrorismo.
El presidente al-Assad puso un énfasis especial en la iniciativa del presidente ruso Vladmir Putin, destacando que Siria cuenta con la alianza creada en virtud de esta iniciativa bautizada entre Siria, Rusia, Irak e Irán.
Hablando sobre las conversaciones rusas-estadounidenses, y si estas conversaciones se consideran como una intervención rusa en los asuntos sirios, el presidente al-Assad dijo: “tenemos relaciones antiguas con la antigua Unión Soviética y más tarde con Rusia, por más de seis décadas. Nunca han tratado de imponer nada a nosotros a lo largo de la historia de estas relaciones, especialmente durante la crisis. El diálogo entre Rusia y EEUU no se trata de una injerencia en Siria, el diálogo está pasando entre dos partes: uno que cree en la injerencia en los asuntos de otros estados, es decir, Estados Unidos y Occidente, y el otro busca impedir tal intervención, impedir la hegemonía y la violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad y la Carta de la ONU, es decir, Rusia, los países BRICS y un gran número de otros países.”
Volviendo al tema de las negociaciones con la oposición, y sí el presidente sirio puede adelantar una conferencia de Moscú III, al-Assad expresó: “no, si el trabajo se realiza con los mismos mecanismos, es decir, la participación de grupos de la oposición formados en Occidente y en países regionales hostiles a Siria que han sido parte del derramamiento de sangre como Arabia Saudita, Qatar y Turquía, esta oposición no pueden dejar de aplicar las agendas de estos países”.
El presidente al-Assad aludió a la importancia de la conferencia de Moscú, puesto que la misma tiene un mecanismos diferente y debate la totalidad del comunicado de Ginebra, que incluye disposiciones claras como la independencia de Siria, la integridad territorial y el diálogo sirio-sirio, mientras que la de Ginebra se centraba en un sola punto que “es el organismo de transición”.
Moscú III allanará el camino hacia Ginebra III, dijo.
Y sobre la iniciativa iraní planteada por el canciller Yawad Zarif, el presidente al-Assad dijo que Siria está de total acuerdo con los principios de la misma, sin embargo la nueva iniciativa del presidente ruso Vladmir Putin y sus declaraciones en la Conferencia del G8 ocasionaron cambios.
En este contexto, el presidente al-Assad sostuvo que Siria mantiene contactos con la Cancillería iraní para que esta “trascedente iniciativa” iraní armonice con los nuevos cambios a nivel sirio y sirio-iraquí.
Y sobre la llegada de un buque de guerra chino y una portaavión rusa al puerto de Latakia, el mandatario sirio señaló que China ha anunciado expresamente que no participará con el aspecto militar en la guerra contra el terrorismo. Sin embargo, este país apoya la iniciativa del presidente Putin respecto a la lucha aniterrorista, reveló., Al-Assad dijo que Rusia tiene presencia en los aeropuertos sirios y no necesita esta portaavión.
El presidente al-Assad aseveró que la alianza entre Siria, Irán y Hezbullah ha contribuido en reforzar la independencia de los países de la región, agregando que este eje de resistencia logrará vencer el terrorismo que “es una nueva herramienta para subyugar a la región”.
Respecto a lo que se produjo en Mina en Arabia Saudita, el presidente al-Assad dirigió sus sinceras condolencias al pueblo iraní por esta catástrofe humana. “Es un incidente doloroso para muchos países del mundo, que perdieron a sus ciudadanos en el incidente”, dijo.
Asimismo fustigó que el régimen saudí impidió a lo largo de cuatro años a los sirios de practicar los rituales de Hajj en Mekka por meras razones políticas, es un incidente peligro, puesto que “Hajj no es un evento saudí, es un evento islámico internacional”.
El presidente concluyó la entrevista reiterando que el pueblo sirio es el que decide sobre su presidente por vía de las elecciones, dirigiendo un llamado a los gobiernos occidentales para trabajar por los intereses nacionales de sus países y no por sus propios intereses electorales.
Lynn A., Riyad Sh.