Beirut, SANA
El secretario general del Movimiento de Resistencia de Líbano (Hezbolá), Sayyed Hasan Nasrallah, afirmó que la firmeza de Siria, el apoyo de sus aliados durante cinco años de guerra y el rebote del terrorismo sobre los países que los apoyaron llevó a un cambio en la posición internacional hacia Siria.
En una entrevista concedida a la cadena libanesa Al-Manar, Nasrallah precisó que las consecuencias y los resultados del fracaso han comenzado a aparecer en aquellos que se implicaron en la guerra global contra Siria y trajeron a los terroristas de todo el mundo a ese país y le proporcionaron apoyo mediático, financiero y logístico.
Sobre la ampliación del apoyo ruso a Siria, afirmó que Siria es el último aliado de Rusia en la región y si la pierde perdería toda su influencia en esta zona, reafirmando que desde el inicio de la crisis siria en 2011, Rusia ha expresado su apoyo a Siria por diferentes vías, entre ellas la mediática, militar y política.
“Saludamos a todos los que apoyan a este frente, pues con su cooperación ayudarán a alejar los peligros que constituyen las amenazas para Siria y la región; por tanto calificamos de positiva la intervención de Rusia y ojalá tenga resultados positivos”, dijo Nasrallah.
Así, aseguró la coordinación de todas las movilizaciones rusas en cuanto la crisis siria con los países aliados del Gobierno de Damasco.
“Los intereses políticos y estratégicos de Rusia para influir en los avatares de la región están ligados a la situación en Siria; y una de las razones del fracaso de Estados Unidos en Siria ha sido la intervención de Rusia”, señaló.
Tras destacar la “seriedad” de Irán y Rusia en respaldar al presidente sirio, Bashar al-Asad, Nasrallah recordó que la demanda de Irán a Siria consiste en la permanencia de este país en el eje de la Resistencia, sin haber intervenido en asuntos internos de ese país árabe.
“Las decisiones en Siria son totalmente sirias y los esfuerzos de Irán solo consisten en impedir el dominio del terrorismo en ese país árabe”, manifestó el secretario general de Hezbolá para luego indicar que la intervención rusa y su alcance también dependen de la solicitud del Gobierno sirio.
En otra parte de sus declaraciones, Nasrallah mencionó las nuevas consecuencias de la crisis siria para el continente europeo y ha hecho hincapié en que “ha fracasado la estrategia de Estados Unidos en Siria y la de la coalición anti-Daesh”.
“La solución de la crisis migratoria para los europeos cruza por la solución del problema principal, es decir, el cese de la guerra en Siria”, declaró, a la hora que ha mencionado el llamado de Rusia a formar una verdadera coalición contra grupos terroristas, y principalmente contra la banda takfirí EI.
A criterio del máximo titular de Hezbolá, por medio de la crisis en Ucrania, Estados Unidos tiene el objetivo de alejar a Rusia de Siria, empero, hasta el momento no ha cosechado fruto alguno en este plan.
Sobre el papel de Israel en la crisis siria, Nasrallah recordó que Tel Aviv saca el máximo provecho de ese conflicto, busca la división de Siria y la caída del Gobierno sirio.
No obstante, agregó, la nueva postura mundial pide la conservación del actual sistema político en Siria, y esto no es agradable para Israel, ya que la supervivencia del Gobierno sirio se traduciría en una gran victoria para el eje de la Resistencia y una amenaza para Israel.
“Israel abusa de las divergencias entre países árabes y su falta de atención a la causa palestina, Israel cree en la inexistencia de una sociedad árabe y con sus actos en la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén), intenta materializar su plan”, advirtió.
Refiriéndose a los enfrentamientos entre terroristas y las fuerzas del Ejército sirio y de Hezbolá en la ciudad siria de Al-Zabadani, Nasrallah destacó la importancia de esa guerra para garantizar la seguridad de los caminos que conducen hacia Damasco y las fronteras sirias.
Según el secretario general de este movimiento, la guerra en Al-Zabadani es un prólogo para un posterior avance hacia Kafarya y Al-Fuah, en la provincia noroccidental de Idleb.
En tanto, ha detallado que la unidad de los países regionales en la lucha antiterrorista sería clave: “por ejemplo, bastaría que Turquía cesara la compra de petróleo a Daesh y el traslado de terroristas y el envío de armas y equipamientos a través de sus fronteras, sería un gran servicio en el combate contra el terrorismo; o bastaría con el cese de apoyos mediáticos de algunos países al terrorismo, con el fin de hacer más seria esa lucha”.
Fady M., Lynn A.