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Tartous, 17 ene (SANA) Con voluntad y determinación, Rabi Munir Baloul, un militar sirio herido durante la guerra, montó su propio negocio del cual se sostiene y a la vez, apoya la economía de su país.
Baloul, de 35 años de edad, es oriundo del pueblo Al-Jarwiya en la zona rural de la provincia de Tartous, logró superar sus lesiones al establecer un taller de carpintería artesanal.
El proyecto arrancó hace un año, y fue, según afirma, producto de un talento que dominó desde niño, y es fabricar sencillas manualidades que regalaba a sus familiares y amigos.
En su pequeño espacio, Baloul convierte la madera en relojes de pared, cuadros para pinturas, sillas, rosarios, llaveros, entre otros.
La lesión que sufrió Baloul en 2013 a consecuencia de la explosión de un coche bomba contra soldados del ejército sirio, provocó la pérdida de su ojo derecho y limitaciones en el movimiento de la mano izquierda, además de múltiples metrallas sembradas aún en todo su cuerpo, por lo tanto, tuvo una tasa de discapacidad fística del 76,6 por ciento.
Dirigió un mensaje a sus amigos que resultaron discapacitados físicamente a no perder la esperanza y a armarse de paciencia para que puedan apoyar la patria de forma diferente y productiva.
la/fm
