Sus poemas lograron mover las aguas estancadas de la poesía, y miraba la vida con ojos de futuro, ya que muchos de los artículos que escribió durante años parecían describir lo que está sucediendo actualmente.
Damasco, 09 jun (SANA) Como un pozo que necesita agua, y un arma que necesita municiones, la escritura también necesita un profundo talento, pasión, paciencia y sufrimiento, todos estos factores los reunía el gran poeta y escritor sirio, el más atrevido y melancólico, Muhammad Al-Maghout.
Al-Maghout es uno de los poetas más destacados de la prosa poética o el poema libre en el mundo árabe. Nació en Salamieh, provincia central de Hama, el 12 de diciembre de 1934, y recibió su educación en su ciudad natal, así como en la capital Damasco.
El escritor no recibió suficiente enseñanza, ya que dejó la escuela a una edad temprana, sin embargo, se convirtió en una figura literaria profesional de la política satírica, y escribió muchas obras críticas que desempeñaron un papel importante en el desarrollo del teatro político en el mundo árabe.
Sus poemas lograron mover las aguas estancadas de la poesía, y miraba la vida con ojos de futuro, ya que muchos de los artículos que escribió durante años parecían describir lo que está sucediendo actualmente.
El atrevido autor viajó a la capital libanesa, Beirut, y allí conoció a muchos poetas y escritores famosos como Youssef al-Khal, Adonis y el poeta iraquí Badr Shaker al-Sayyab, entre otros.
En los años 60, al-Maghout laboró como periodista, publicando una serie de artículos satíricos en la revista al-Binaa, además de su obra “El Payaso”. Más tarde, fue nombrado editor en jefe de la revista al-Shurta donde escribía artículos satíricos periódicamente.
Además, redactó una serie de obras satíricas, las más importantes de las cuales son; El Pueblo de Tishreen, Alienación y Brindis Patria, todos fueron interpretados por varios actores sirios de renombre como Dureid Laham y Nihad Qalee.
Al-Maghout continuaba su labor periodística durante los años setenta, escribiendo para el diario sirio “Tishreen”, y para la revista “Al-Mustaqbal”, que se editaba en la capital francesa, París.
Los años ochenta del siglo pasado fueron difíciles, duros y llenos de tristeza para Al-Maghout, ya que se vio afectado por la muerte de su hermana, padre y esposa durante un corto período de tiempo entre 1984 y 1985, y de su madre en 1988. La muerte de su esposa le dejaba muy apenado que ni se volvió a casar otra vez.
El 2 de mayo de 2005, recibió la Orden Siria del Mérito del Grado de Excelencia en reconocimiento a su aporte literario creativo, en una ceremonia organizada por la Biblioteca Nacional Al-Assad.
El lunes 3 de abril de 2006, el corazón de Muhammad al-Maghout se detuvo y falleció a la edad de 73 años, dejando un gran e importante patrimonio cultural.
Por Fedaa al-Rahyiah para SANA en Español