Ginebra, SANA
El Representante Permanente de Siria ante las Naciones Unidas en Ginebra, el embajador Hossam al-Din Alaa, dijo que el enfoque de la Comisión Internacional de Investigación sobre Siria es parcializado, sesgado y hostil al gobierno sirio, resaltando que las conclusiones de mencionado informe no se efectuaron de forma profesional y neutral.
La afirmación del embajador Alaa tuvo lugar durante la sesión de diálogo interactivo con la Comisión Internacional de Investigación sobre la situación en Siria, que se celebró en Ginebra en el marco del 29º periodo del Consejo de Derechos Humanos.
El diplomático sirio destacó que “el informe de la Comisión no incluye, y ni siquiera hace alusión, a los ataques con misiles y cohetes contra los barrios residenciales de las ciudades de Damasco y Alepo, lanzados por los terroristas que algunos insisten en llamar “oposición moderada” y que se cobraron la vida de decenas de civiles, entre ellos niños y mujeres”.
Explicó también, que “durante el mismo periodo que abarca el informe, sucedieron las masacres contra los poblados de Ishtebrek, Qaleb Lauzeh y Palmira, y en los que las organizaciones terroristas del “Frente al-Nousra” y el “Estado Islámico” asesinaron y secuestraron a cientos de civiles, sin embargo el mencionado informe no dice nada de estos crímenes teniendo en cuenta que la misión siria en Ginebra había enviado cartas documentadas al respecto a la Comisión y al Consejo de Derechos Humanos”.
Alaa añadió que “la continuación de esta deliberada indiferencia respecto a la información proporcionada por el gobierno sirio sobre las organizaciones terroristas y la responsabilidad de los países patrocinadores de las mismas, indica que Comisión mantiene su mismo enfoque de hace cuatro años, el cual busca lograr un único objetivo de abusar de la imagen del Estado siria a base de informaciones fabricadas e inventadas que ni siquiera llegan al nivel de alegaciones”.
El embajador sirio en Ginebra precisó que las acusaciones citadas por el informe de la Comisión sobre los ataques deliberados contra la población civil y las instalaciones civiles, e impedir la entrega de ayuda humanitaria a los desplazados y para algunas áreas, además de atacar a los sitios arqueológicos, son acusaciones inaceptables y políticamente motivados y además la lógica y la realidad sobre el terreno las refuta”.
El delegado Alaa denunció que “la Comisión ignoró deliberadamente hacer referencia a las disposiciones del Derecho Internacional Humanitario, que prohíbe a los grupos armados posicionarse deliberadamente en medio de los civiles y en los barrios residenciales o en las instalaciones civiles por ser violaciones del derecho internacional humanitario”.
“Las organizaciones terroristas armadas usan las escuelas y los hospitales como centros militares y de detención, y estos son hechos documentados por el equipo de las Naciones Unidas que opera en Siria, no obstante, la Comisión pasa por alto estos hechos”, acotó.
El delegado sirio manifestó que el gobierno sirio está haciendo su mejor esfuerzo para satisfacer las necesidades básicas de sus ciudadanos en medio de un difícil ambiente de seguridad y a pesar de los ataques sistemáticos por parte de las organizaciones terroristas contra las instituciones de infraestructura y de servicios, reafirmando que el gobierno está cumpliendo sus responsabilidades en esta área, sin discriminación alguna.
El embajador lamentó la omisión del informe a los ataques del “Ejército del Islam” y “Frente al-Nousra” contra los sitios arqueológicos en muchas áreas, incluyendo la antigua ciudad de Alepo, donde las organizaciones terroristas destruyeron muchos sitios arqueológicos mediante la excavación de túneles y detonarlos debajo esos sitios.
El embajador sirio concluyó diciendo que “la continuación del enfoque hostil y sesgado de la Comisión hace que Damasco rechace esos informes y sus conclusiones que carecen de profesionalidad y neutralidad, y van más allá de sus competencias”.
Fady M., Lynn A.