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En una entrevista con SANA, explicó que gracias al apoyo de su familia y sus amigos, en particular su madre, quien la enseñó a ser autosuficiente y no depender a nadie al utilizar sus pies y manejarlos como si fueran manos.
Tartous, 13 jun (SANA) Nació sin brazos, pero esto no impidió la joven siria Gufran Ahmad de hacer su vida como las otras personas con fuerza y determinación.
A pesar de su severa discapacidad, Gufran, de 20 años de edad, luchó contra viento y marea para demostrar que era posible derribar cualquier barrera física con voluntad.
Ella puso todo su empeño para educarse y continuar sus estudios y ahora está en el segundo año en la Facultad de Ingeniería Técnica de la Universidad de Tartous .
En una entrevista con SANA, explicó que gracias al apoyo de su familia y sus amigos, en particular su madre, quien la enseñó a ser autosuficiente y no depender a nadie al utilizar sus pies y manejarlos como si fueran manos.
Con mis extremidades inferiores puedo dibujar, que es mi pasatiempo favorito, además de realizar otras tareas domésticas, agregó.
La historia de Gufran es un gran ejemplo de superación y una buena muestra de que todo es posible con voluntad, esfuerzo y constancia.
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