Moscú, SANA
El canciller ruso, Serguei Lavrov anunció que Moscú y Washigton lograron acercar posturas sobre las vías de solucionar la crisis en Siria.
En una rueda de prensa conjunta celebrada ayer en Sochi con el secretario del Estado de EEUU, John Kerry después de negociaciones que se desarrollaron a lo largo de cuatro horas, Lavrov señaló que ambas partes acordaron que el proceso político en Siria debe ser guiado por los propios sirios, y todos los bandos correspondientes han de formar parte de en este proceso.
El jefe de la diplomacia rusa destacó la importancia de que los bandos exteriores que tiene influencia sobre la oposición trabajen para impulsarla a iniciar negociaciones a base de la declaración de Ginebra.
Asimismo reiteró el rechazo de Rusia de politizar el asunto del arsenal químico de Siria, renovando la postura de Moscú que llama a que una unidad especial de la Organización de Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) investigue los informes que hablan del uso de las armas químicas en Siria.
“Queremos una investigación profesional y honesto para impedir la reproducción de los intentos que habíamos visto en agosto del año 2014, de explotar el asunto de las armas químicas como un medio no solamente de ejercer una presión política sino también de justificar el uso de la fuerza contra Siria”, acotó.
A su vez, Kerry se puso de acuerdo con Lavrov de que el crecimiento de la actividades de las organizaciones terroristas tal como el Estado Islámico no amenaza solamente a Sirias sino también a toda la región, y aseveró que Rusia es un socio trascendente en cuanto a la lucha contra el extremismo, aunque no es miembro de la Coalición Internacional contra el EI.
“Ha de trabajar para luchar contra el EI y obligarlo a dejar Irak y Siria para que no nos amenace”, aseveró el Secretario del Estado de EEUU.
Lynn A., Hala B.