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Damasco, 10 mar (SANA) Desde que comenzó la operación militar rusa en Ucrania, algo considerado como el más importante para preservar la seguridad nacional rusa de las amenazas estadounidenses y occidentales, y con la aceleración de los acontecimientos y posiciones, “Israel” no ha podido optar por una postura muy neutral frente a lo que está pasando en Ucrania.
Ya está claro que “Israel” envía combatientes a Ucrania, pero la cuestión del número de estos sigue siendo un tema no declarado y envuelto en cierta ambigüedad.
Desde que comenzó la operación militar rusa en Ucrania, algo considerado como el más importante para preservar la seguridad nacional rusa de las amenazas estadounidenses y occidentales, y con la aceleración de los acontecimientos y posiciones, “Israel” no ha podido optar por una postura muy neutral frente a lo que está pasando en Ucrania.
La prensa israelí se centró en el papel real de “Israel” con respecto a la crisis ucraniana y, durante la primera semana de la operación militar rusa, los titulares de varias páginas han sido que los países occidentales confían en que “Israel” para desempeñar el papel que ellos temen.
El diario Yedioth Ahronoth reveló, citando a Ronen Bergman, especialista en inteligencia del diario, que EE.UU acogió con agrado la solicitud del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky al primer ministro israelí Naftali Bennett de ayudar a su país en el suministro de armas para enfrentar a Rusia.
A pesar de las preocupaciones israelíes de que tal paso podría enfadar al presidente ruso, Vladimir Putin, el régimen israelí respondió a las posiciones de los funcionarios estadounidenses y tomó una postura más clara sobre lo que está sucediendo en Ucrania, lo que lo llevó a condenar la operación militar rusa ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
La postura israelí con respecto a la referida operación militar no se limitó en la condena ante la ONU, ya los medios israelíes revelaron que “Israel” envió dos aviones cargados de equipos, y afirmó que posteriormente enviaría dos aviones más.
Durante la primera semana de la operación militar rusa en Ucrania, los medios israelíes revelaron que la empresa israelí “Hajour” vendió a Kiev cascos, como el que usaba el presidente ucraniano Zelensky. Asimismo, “Israel ” vendió a Ucrania sistemas de espionaje, a través de las sedes de empresas israelíes en el extranjero.
El sitio web israelí de noticias Walla difundió un informe titulado “¿Envía Israel a sus soldados a luchar en su país de origen, Ucrania?”. El portal informativo israelí anunció que la embajada de Ucrania en “Israel” emitió un comunicado llamando a los israelíes de origen ucraniano a participar en la guerra por su país de origen.
En cuanto al periódico Yediot Aharonot, publicó un reportaje titulado “Entre Ucrania y la cobertura de Gaza: ¿luchar por la patria?”, en el que informaba que varios soldados israelíes decidieron responder al llamado de la embajada ucraniana y luchar lado a lado con las fuerzas ucranianas contra Rusia.
El periódico mostró modelos en vivo de soldados israelíes que, según el periódico, decidieron participar en la lucha contra Rusia, como es el caso el soldado Nikolai, que es de la Brigada Givati, también el soldado israelí Serguei Novitsky de origen ucraniano, así como Boris Nemirovsky, ingeniero del Consejo Regional de Eshkol.
El medio también reveló que varios soldados del escuadrón “Netzah Yehuda” de la Brigada Kfir en el “ejército israelí” ahora están luchando en las filas del ejército ucraniano, tras responder a la llamada de la embajada de Ucrania en “Israel”.
Ya está claro que “Israel” envía combatientes a Ucrania, pero la cuestión del número de estos sigue siendo un problema no declarado y envuelto en cierta ambigüedad, lo cual fue confirmado por el embajador de Ucrania en “Israel”, Yevgeny Kornichuk, por medio de declaraciones transmitidas por el Canal 12 israelí. El diplomático ucraniano dijo que cualquier persona que tenga un pasaporte ucraniano puede ayudar a Ucrania en su guerra contra Rusia y que Kiev facilitará los trámites del mismo.
Según los medios israelíes, un gran número de soldados de la Brigada Golani, la División de Inteligencia y las Unidades de Recopilación de Información anunciaron su incorporación a la defensa de Kiev y a la lucha contra Rusia. Esto fue confirmado, hace unos días, tras el anuncio del Ministerio de Relaciones Exteriores de “Israel” de que el primer israelí perdió la vida durante los enfrentamientos en Ucrania.
Según informes ucranianos, Kiev ha establecido una unidad militar que depende de la recepción de voluntarios procedentes del exterior, algo que concuerda con los informes publicados por el periódico Yediot Aharonot, en los que se habla de soldados israelíes que pertenecían la Brigada Golani y que ahora forman parte de los soldados en la primera línea de la lucha contra Rusia y en las filas de las unidades especiales ucranianas.
Las circunstancias del trato de “Israel” con la operación militar de Rusia en Ucrania da dos indicaciones principales:
La primera: El estado de seguimiento, apoyo y participación de “Israel”, ya sea por condena, suministro o por la participación de sus soldados en esta guerra, tras estímulo estadounidense y occidental de dicho papel, da una indicación de que la Sala de Operaciones de Guerra de Ucrania tiene su sede en “Al-Kiriyah”, ya que es el principal centro gubernamental israelí en Tel Aviv y considerado como la base fundamental para el liderazgo del “ejército” israelí.
La segunda: el interés, a gran escala, de los medios israelíes por lo que está sucediendo en Ucrania, como si “Israel” hubiera establecido un departamento especial para la guerra psicológica contra Rusia, basado en los medios, sitios web y periódicos israelíes.
“Israel” ha caído en una gran trampa ante el limitado espacio de maniobra que tiene frente a lo que está pasando entre Rusia y Ucrania, y suministrar armas a Kiev no es más que una futilidad continua o como si le diera vitaminas a un moribundo, y que está librando una batalla de otros en su territorio, y esto no hará ningún cambio en el enfrentamiento militar existente, ya que está luchando contra una de las mayores potencias del mundo, Rusia, que está llevando a cabo sus operaciones militares en el territorio ucraniano según cálculos bien estudiados y objetivos claros que son:
Acabar con la hegemonía estadounidense dependiente de sus aliados en Europa del Oeste, acabar con la expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia, y por lo tanto, preservar su seguridad nacional y regional.
Además, impedir a Ucrania unirse a la OTAN, algo que impulsará a Moscú a estar más decidida a continuar la operación militar hasta llegar a cambiar el régimen proestadounidense y occidental allí.
No hay problema en la crisis ruso-ucraniana como el de “Israel”, una frase que puede resumir el escenario tras la finalización de la primera semana de la operación militar rusa en Ucrania. Esto es lo que dijo el comentarista de asuntos militares israelíes en el periódico Maariv, Alon Ben David, quien dijo: “A pesar de toda la simpatía con Ucrania, el juego ha terminado. Los pasos diplomáticos tomados por la administración Biden no afectarán mucho a Rusia, y cualquier paso diplomático que no esté respaldado por la fuerza militar no tiene eficacia”.
Lo que está sucediendo entre Rusia y Ucrania es un gran conflicto internacional que Ucrania está librando en nombre de Occidente, y los sucesivos acontecimientos sobre el terreno indican el comienzo de un nuevo capítulo en la política internacional. Una política basada en el principio de anteponer los intereses y la seguridad nacional, ya que todos los indicadores confirman que hay una nueva fase en el conflicto internacional que está preparando para una nueva realidad en la que emergerá una nueva potencia internacional que incluye a Rusia, que trabaja militarmente para preservar su seguridad nacional y regional, luego China, que busca un fuerte crecimiento económico frente a Estados Unidos, con el apoyo de muchos países de la región, como Irán, lo que cambiaría fundamentalmente el mapa geopolítico que se está aproximando.
Fuente: Al-Mayadeen TV
