Moscú, 2 mar (SANA) El Ministerio de Defensa ruso anunció hoy que 498 soldados rusos murieron en el cumplimiento de su deber en la operación militar especial en Ucrania, señalando al mismo tiempo que las pérdidas de las fuerzas ucranianas superaron los 2.870 muertos.
El portavoz del ministerio, Igor Konashenkov, detalló a través de un comunicado que 1.597 soldados rusos resultaron heridos durante la operación, y agregó que las bajas en las filas de los batallones nacionalistas y miembros de las fuerzas armadas ucranianas superan los 2.870 muertos y unos 3.700 heridos, además de capturar a unos 572 soldados ucranianos.
Konashenkov reveló que las fuerzas rusas continúan atacando los sitios de infraestructura militar en Ucrania, y explicó que esto resultó en la destrucción de 1.533 sitios, incluidos 54 centros de comando y puntos de comunicación de las Fuerzas Armadas de Ucrania, 39 sistemas antiaéreos del modelo S- 300, Buk-M1 y Osa, así como 52 estaciones de radar.
Agregó que la operación resultó en la destrucción de 47 aviones militares ucranianos en tierra y el derribo de 13 aviones en el aire, además de la destrucción de 484 tanques y otros vehículos blindados, 63 lanzacohetes, 217 cañones de campo, 336 piezas de vehículos militares especiales y 47 drones.
Konashenkov señaló que el avance de las fuerzas de la República Popular de Lugansk resultó en su control de varias ciudades nuevas, mientras que el grupo de fuerzas de la República Popular de Donetsk completó el sitio de la ciudad de Mariupol en la costa del Mar de Azov.
El portavoz militar ruso subrayó que las fuerzas rusas están tomando medidas para garantizar la seguridad de la población civil en Ucrania, incluso en la ciudad de Mariupol, donde miembros de las brigadas nacionalistas ucranianas han desplegado vehículos blindados y artillería, incluidos lanzacohetes, en zonas residenciales.
Según explica Konashenkov, los residentes de Mariupol pueden salir a través de un corredor seguro que se abrió en la parte oriental, y agregó que se abrieron corredores similares para garantizar la salida de quienes lo deseen desde la capital Kiev y la ciudad de Járkov en el este de Ucrania.
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