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Ginebra, SANA
La Alta Comisión de Derechos Humanos condenó las medidas israelíes y los ataques de los colonos contra familias palestinas en el barrio de Sheikh Jarrah, en Jerusalén oriental, y señaló que ello “puede constituir un crimen de guerra”, informó la agencia AFP.
El portavoz de la Comisión, Robert Colville, dijo: “Los desalojos contravienen las leyes internacionales que afirman que Jerusalén Este es parte de los territorios palestinos ocupados”.
Colville señaló que “revisando las escenas inquietantes en Sheikh Jarrah durante los últimos días, nos gustaría enfatizar que Jerusalén Este todavía es parte de los territorios palestinos ocupados y está sujeta al derecho internacional humanitario”.
También señaló: “La potencia ocupante debe respetar la propiedad privada en las tierras ocupadas y no puede confiscarla o imponer sus propias leyes para expulsar a los palestinos de sus hogares”.
“La Ley de Asuntos Administrativos se aplica de manera discriminatoria para facilitar la transferencia de “Israel” a sus residentes a la Jerusalén Oriental ocupada, y esto está prohibido por el derecho internacional humanitario y constituye una violación del Cuarto Convenio de Ginebra y puede constituir crímenes de guerra”, agregó.
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