Beirut ,SANA
Muhammad Rustom, un escultor sirio expatriado refleja su lealtad y amor a la patria madre a través de sus obras escultóricas.
Mohamed, quien vive entre el Líbano y Guinea, esculpió en una roca una representación de las libras siria y libanesa y ahora está colocada en una de las plazas de la ciudad libanesa de Tiro.
La obra tiene casi cuatro metros de largo y dos metros de alto y pesa cerca de 12 toneladas.
“La guerra económica impuesta a Siria no socavará la civilización e historia de nuestro país, y los sirios resistirán con cultura, ciencia y arte”, explicó Rustom sobre la idea de su trabajo a la agencia SANA.
Entre sus distinguidas obras se encuentra el rosario gigante, que encarna la idea de hermandad y convivencia entre religiones, y tiene 12 metros de largo y termina en una cruz y la media luna.
El artista señaló que muy pronto volverá a Siria para realizar el tablero de ajedrez más grande del mundo.
La viceministra de Cultura, Sanaa Shawa, declaró a SANA, que la exhibición forma parte del programa en curso del Ministerio de Cultura para alentar a los artistas jóvenes.
W.S/F.M