Tokio, SANA
El ex embajador de Japón en Siria, Masaki Kunieda, afirmó que Occidente desempeñó un papel clave en atizar la crisis siria.
En un libro titulado “la Historia contemporánea y la crisis actual en Siria”, el ex embajador japonés resaltó el papel de los medios de información en hacer la propaganda de “las revoluciones pacíficas” y “la demonización de los gobiernos”.
El diplomático japonés señaló que actores internacionales intervinieron en la crisis siria conforme con sus intereses, considerando que las Naciones Unidas asumen la responsabilidad de tal actitud.
Kunieda arrojó luz sobre el dominio de las organizaciones terroristas extremistas sobre la oposición política en Siria debido a su debilidad y las discrepancias entre sus bandos.
Asimismo dijo que cuando él fungía como embajador en Siria fue testigo de que el presidente sirio Bashar al-Assad buscaba alentar a todos los espectros del pueblo sirio para participar en el proceso de reforma tanto política como económica, y alcanzar la igualdad entre todos los ciudadanos hasta que vino la crisis que fue empleada por muchas partes para sembrar la discordia.
El ex embajador japonés en Siria puso de relieve que Siria es un país laico donde no hay diferencia entre las confesiones o sectas.