Nueva York, SANA
El Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) aprobó con mayoría de 45 votos, una resolución que condena las repercusiones sociales y económicas de la ocupación israelí del Golán sirio ocupado y los territorios palestinos ocupados.
En una declaración, la Segundo Secretario de la Misión Permanente de Siria ante las Naciones Unidas en Nueva York, Rua Sharabji, destacó que la incapacidad del sistema de las Naciones Unidas para implementar sus resoluciones pertinentes para poner fin a la ocupación israelí del Golán sirio constituye una amenaza para la paz, la seguridad y la estabilidad en la región y el mundo.
“Mi delegación expresa su agradecimiento por el informe de la Comisión Económica y Social para Asia Occidental (CESPAO) y manifiesta su satisfacción por la relativa mejora en el enfoque del informe”, dijo Sharbaji.
Explicó que las últimas violaciones israelíes tenían como objetivo consolidar la realidad de la ocupación mediante una serie de medidas ilegales para confiscar más tierras de los propietarios sirios con el pretexto de establecer el llamado “proyecto de parques eólicos para producir electricidad”, un proyecto dedicado a generar electricidad para los asentamientos ilegales israelíes.
La diplomática siria agregó además que las autoridades de ocupación realizan un estudio geográfico y topográfico de las tierras agrícolas sirias ocupadas en el Golán con el objetivo de registrarlas en los círculos inmobiliarios pertenecientes a las autoridades de ocupación y emitir títulos de propiedad “israelíes” alternativos a los documentos de propiedad sirios.
Precisó que el objetivo de esta medida es consolidar la realidad de la ocupación israelí ilegal, en violación flagrante de la resolución 497 de 1981 del Consejo de Seguridad que considera nula y sin efecto legal a la decisión de Israel de imponer sus leyes, poderes y administración en el Golán ocupado.
Concluyó que hay que tratar las raíces de la crisis humanitaria consistentes en la continuación de la ocupación israelí a largo plazo y la incapacidad del sistema de las Naciones Unidas para implementar sus resoluciones pertinentes para poner fin a esta ocupación, lo que constituye una amenaza para la paz, la seguridad y la estabilidad en esa región y en el mundo.
F. Marouf/ E. Dubian